Orsi reafirma el compromiso institucional: “Acompañar a intendentes de todos los partidos es un deber de la Presidencia”.
El presidente de la República, Yamandú Orsi, participó en las ceremonias de asunción de los nuevos intendentes de Canelones, Maldonado y Río Negro, reafirmando su compromiso con el fortalecimiento institucional y la convivencia democrática. A lo largo de la jornada, Orsi valoró el sistema político uruguayo como ejemplo de estabilidad, respeto a la alternancia y cooperación entre distintos niveles de gobierno, sin importar el signo partidario.
Fortalecimiento de la convivencia política y respeto institucional
En diálogo con medios locales durante su visita a Fray Bentos, donde asistió a la toma de posesión del nuevo intendente de Río Negro, Guillermo Levratto, Orsi destacó la solidez del sistema democrático uruguayo. Subrayó que la convivencia política entre partidos no solo es parte de la tradición nacional, sino un rasgo distintivo frente a otras realidades de la región.
“La convivencia política es un dato de la normalidad uruguaya que, si uno la analiza en profundidad, se dará cuenta de que no es tan habitual en América Latina”, expresó el mandatario.
Orsi también valoró el rol de los partidos y de las instituciones como pilares fundamentales de la democracia, señalando que la alternancia pacífica en los gobiernos departamentales refleja el buen estado del sistema político del país.
Canelones: continuidad generacional con apertura a la innovación
La jornada comenzó en Canelones, donde Francisco Legnani asumió como nuevo intendente. Orsi destacó que su designación representa tanto una continuidad en la línea de gestión como una renovación, al tratarse de un dirigente de una nueva generación.
El presidente aprovechó la ocasión para resaltar la estabilidad democrática alcanzada desde el retorno a la institucionalidad en 1985:
“Haber sido contemporáneo de un proceso democrático que lleva casi cuatro décadas con instituciones sólidas es, sin dudas, un privilegio”, afirmó.
En el acto también estuvieron presentes el secretario de la Presidencia, Alejandro Sánchez, y el prosecretario Jorge Díaz, junto a autoridades departamentales y representantes de distintos organismos del Estado.
Maldonado: respaldo institucional en clave federal
Posteriormente, Orsi se trasladó a la ciudad de Maldonado para participar en la ceremonia de asunción de Miguel Abella como intendente departamental. El evento se desarrolló en las instalaciones de la Dirección de Obra de la Intendencia, y contó con la presencia de la ministra de Salud Pública, Cristina Lustemberg.
La presencia del presidente en un departamento gobernado por otro partido político fue interpretada como un gesto de respeto institucional y de apertura al diálogo interpartidario. Para Orsi, acompañar estos procesos es parte de su rol como presidente de todos los uruguayos, independientemente de su pertenencia partidaria.
Río Negro: cierre de una jornada dedicada a la institucionalidad
La última actividad del día tuvo lugar en Fray Bentos, donde Guillermo Levratto asumió como nuevo intendente de Río Negro, en una ceremonia desarrollada en el histórico teatro Miguel Young.
Además del presidente Orsi, participaron de la ceremonia la vicepresidenta de la República, Carolina Cosse, el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Juan Castillo, y el ministro de Desarrollo Social, Gonzalo Civila, entre otras autoridades nacionales.
Orsi volvió a enfatizar que el respeto y la cooperación entre niveles de gobierno son claves para el desarrollo armónico del país. Reiteró que la Presidencia tiene el deber de acompañar a los gobiernos departamentales de todos los partidos, como parte de una visión integradora de la función pública.
Desde el gobierno expresan que la participación del presidente en estas ceremonias refleja una clara apuesta por el fortalecimiento del tejido democrático, el respeto a la diversidad política y la cooperación entre actores institucionales. En un contexto regional marcado por tensiones políticas y sociales, Uruguay continúa mostrando señales de estabilidad y diálogo, con liderazgos que promueven la convivencia como una herramienta fundamental para el desarrollo del país.